La importancia del calzado en vacaciones.
Las vacaciones de semana santa son de las épocas mas intensas del año, en pocos días hacemos gran cantidad de desplazamientos, no solo en coche, sino andando, ya sea para irnos de vacaciones a la montaña, a la playa o a ver procesiones a cualquier lugar de España, y ¿Por qué no? También a hacer penitencia.
Para todo ello, sabemos que según que actividad hagamos, no tenemos que llevar el mismo calzado, pero tampoco volvernos locos y gastar en calzado, más que en las propias vacaciones.
Como todo en esta vida, hay que analizar, si el calzado que vamos a utilizar será para un rato, un par de veces al año, o si este calzado va a tener cierta continuidad en el tiempo.
Por ejemplo, si soy un apasionado de la montaña, es normal que busque unas buenas botas de caña alta y con una buena suela vibram, la mejor membrana para el agua y cualquier extra que se nos pueda ocurrir. En estos casos, una buena inversión en el calzado, nos saldrá a la larga económico, no solo a nivel de calidad, sino también nos curará en salud frente a posibles problemas físicos.
Si por el contrario, hemos decidido pasar estos días haciendo pequeñas salidas al campo, o largas pero, poco intensas por caminos ya desgastados, como es el caso del Camino de Santiago, que en estas fechas alberga diariamente mas de mil peregrinos. Nos bastará con un calzado cómodo, con suela dura, aunque bien amortiguada, que sea liviano, y que no tenga porque cubrirnos el tobillo de manera obligatoria. Sería recomendable que este calzado llevase algún tipo de membrana, ya sabemos lo que dice el refrán, “en abril aguas mil…”. Un tipo de zapatillas muy aconsejables para esta ocasión son las zapatillas de Trail, ya que cumplirían a la perfección su cometido y suelen ser más económicas que una bota de montaña. También cada vez más, el mercado cuenta con botas de montaña bajas o que cubren justo el tobillo y que hacen que pesen menos que una bota normal de montaña, por lo que para rutas largas notaremos esos gramos de menos.
El mercado del calzado ha evolucionado de manera vertiginosa a lo largo de los últimos años, en cuestión de unos 15 años hemos pasado de comprar calzado de moda muy vistoso, por otro tipo de calzado quizá menos vistoso, pero mucho mas cómodo. Los zapatos de varios centímetros de tacón han pasado a plataformas mas cómodas, e incluso las míticas converse han tenido que reconvertir su clásico perfil, en plataforma, o simplemente reformar sus plantillas en otras más confortables.
Hoy en día pocos son los que se atreven a ir de procesión en procesión con unos castellanos, ni a estar largas horas de pie con unos mocasines. Las marcas de zapatillas deportivas, han visto esa evolución como una oportunidad, y hoy en día, no hay marca de zapatillas que no te haga una línea de moda, con suelas de caramelo para engañar al ojo haciéndose pasar por zapatos, y con suelas de “eva” para mayor comodidad, todo ello acompañado de plantillas muy acolchadas llegando a ser de memory foam, como las innovadoras zapatillas americanas Skechers.
Tan importante es hoy en día el calzado para nosotros, que me atrevería hasta aconsejar al nazareno de fila, que lleva su lento caminar por bandera, que si el costalero lleva cada vez más, ropa cómoda para el trabajo, estos pueden hacer un poco mas agradable su caminar con unas sencillas plantillas de memory foam para su zapato en la penitencia, algo económico y que seguro que agradecerán al día siguiente.